El castillo de Dénia se puede conocer desde diferentes perspectivas y puntos de vista. Su longevidad y riqueza histórica, albergando distintos periodos monárquicos y episodios bélicos, así lo permiten.
Desde el blog de la Guía del Turista queremos invitaros a que descubráis con nosotros parte de la fortaleza dianense viajando hasta la Baja Edad Media, concretamente hasta la segunda mitad del siglo XIV, durante el dominio de los Condes de Dénia. Diferentes fortificaciones y modificaciones en la estructura arquitectónica del castillo forman parte de la herencia que dejó Alfons d’Aragó (También conocido como Alfons “El vell”), el Conde de Dénia.
Algunas torres y lienzos de muralla de esta época recibieron la impronta del conde, especialmente por el atractivo de la figura del propio conde, cuyos dominios abarcaban gran parte de los territorios de la Marina Alta y las montañas de la Marina Baixa, incluyendo el actual término de Benidorm. condado que abarcaba parcialmente puntos de la Marina Alta, la Marina Baixa y la Safor.
Este aristócrata jugó un papel capital a la hora de fortificar las murallas de Dénia, especialmente en el lienzo que integraba el portal del Mar, hoy fosilizado por la calle Diana, así como algunas de las torres de la antigua Vila de Dénia (creada por su abuelo, Jaume II), como la torre de la Pólvora.
El Conde de Dénia fue también responsable de algunas de las intervenciones de mejora que se efectuaron en la ciudad tras la reconquista cristiana, ya en el interior de las murallas. Es el caso de la intervención de mejora en las dependencias del Palau del Palau Vell (posteriormente, del gobernador), con la reparación de cubiertas y tejados en diferentes cámaras como la cocina, el establo o el patio de armas.
Los graffiti medievales más antiguos
Sin embargo, lo más reciente y novedoso cuando hablamos relacionamos el castillo con el Conde de Dénia se puede encontrar en la Dehesa del Gobernador, ubicada al final de la calle Santísima Trinidad, un complejo arqueológico todavía por excavar (allí se hallarán con seguridad elementos de la época andalusí) y que desde 1304 constituía el espacio fortificado de la Albácar. Allí, en una parte del lienzo, se distinguen una serie de graffitis de origen medieval datados entre los siglos XIV y XV que describen elementos y capítulos de la sociedad de la época.
Las obras se encuentran, concretamente, en el exterior de la muralla norte, haciendo mención a la vida marinera y describiendo un paisaje náutico con las embarcaciones características que atracaban por entonces en el puerto de Dénia, cuya importancia ya era capital por su ubicación geoestratégica y punto de partida para multitud de rutas comerciales por el Mediterráneo. Galeras, barcas catalanas, llaüts, pesqueros… son algunos de los elementos que se plasman en las murallas, donde también se puede identificar la representación gráfica de distintas torres, una de las cuales se hallaba en la dársena dianense para advertir a las embarcaciones.
Todos ellos son dibujos reales, confeccionados en el momento de la repriscinación de las murallas, y que supone la publicación más antigua de graffitis medievales que se han hallando en España.